‘Integralia apuesta por la tecnología integrando toda la cadena de producción en un mismo sistema informático’

El aumento tanto de recursos humanos como de materiales han permitido una evolución continua de Integralia, lo que se traduce en un mayor potencial a la hora de abordar  nuevos proyectos de estructura metálica. Así lo afirma el director de Producción de Integralia,  Antonio Abengozar, que además achaca el éxito de la compañía a un equipo de trabajo caracterizado por su implicación, su  autoexigencia y perseverancia.

– ¿Qué capacidad productiva potencial tiene en la actualidad Integralia?

Desde el inicio del proyecto empresarial hasta la actualidad, los recursos tanto humanos como materiales de la empresa se han incrementado sustancialmente, en una evolución continua. Esta evolución permite que nuestra capacidad productiva nos permita abordar la práctica totalidad de proyectos de estructura metálica.

La instalación de fibra óptica entre la oficina técnica y de ingeniería y el taller, ¿qué ventajas ofrece para la coordinación productiva?

Esta es una de las últimas mejoras que hemos implantado unida a la formación que se ha dado a los mandos intermedios del taller en las herramientas informáticas que utiliza nuestra Oficina Técnica,  nos ha permitido integrar a toda la cadena de producción en un mismo sistema informático, lo que agiliza la obtención de información, resolución de dudas, gestión de modificaciones, trazabilidad de los materiales, etc. Todo ello,  se traduce en una mejora de la eficacia del proceso y por lo tanto en un aumento de la calidad y cantidad del producto.

– Por otro lado, en los dos últimos años se han ampliado las instalaciones útiles del taller con nueva superficie adicional. ¿Qué oportunidades ofrecen a nivel productivo esta nueva infraestructura anexa?

Las ampliaciones sucesivas que se han desarrollado han sido como respuesta a las demandas del mercado y la optimización del producto ofrecido por Integralia. En ese sentido, detectamos que la aplicación de Sistemas de Protección de la estructura frente a la corrosión  como a la acción del fuego, en nuestras instalaciones era y es una demanda sistemática de nuestros clientes y poder ofrecer ese servicio en nuestras propias instalaciones mejoraría nuestro producto y actualmente es el uso que se está realizando de esas ampliaciones.

Por otro lado, entendemos que nuestras instalaciones deben ser versátiles y para ello es necesario tener esa premisa en cuenta cuando se acometen las ampliaciones. Por eso, las nuevas naves se han construido con las características geométricas y resistentes y  se han  dotado de los medios necesarios para poder realizar, llegado el caso, otras fases del proceso de fabricación de la estructura metálica.

– ¿Cuál ha sido el proyecto más complejo técnicamente al que se ha enfrentado Integralia?

La complejidad técnica de una estructura se puede medir por muchos parámetros, por la complejidad de la fabricación, por la complejidad del montaje, la complejidad de la logística o la complejidad derivada de los plazos disponibles para la ejecución del proyecto y la repercusión del mismo.

Si tenemos en cuenta todos esos factores, desde mi punto de vista, la cubierta del  Nuevo San Mamés sería el proyecto más complejo que hemos abordado, sin embargo analizando uno por uno cada factor tendría una respuesta diferente.

–  ¿De cuál os sentís más orgullosos?

A nivel de colectivo, por varios factores como son las características del país donde se desarrollaron, las diferencias culturales existentes, la complejidad técnica de fabricación y logística de los proyectos estamos muy orgullosos de los estadios de Babil y Al-Russafa en Irak.

A nivel estrictamente personal tengo un especial recuerdo por un proyecto que nos supuso un gran volumen en cuanto a toneladas ejecutadas: es la Pasarela Interior que fabricamos y montamos para la cadena Primark en el Hall principal de la nueva tienda situada en la Gran Vía de Madrid. Supuso un gran reto para todos los miembros de INTEGRALIA tanto  a nivel de calidad de ejecución, ya que nos sirvió para obtener la cualificación EXC-4 en la fabricación de estructuras metálicas,  como a nivel de montaje puesto que se realizó en el interior de un edificio emblemático en pleno centro de Madrid que obligo a idear un sistema de montaje específico para esa obra.

– A título particular, ¿qué tipo de proyecto te gustaría realizar?

Desde siempre he tenido debilidad por los puentes y me gustan especialmente los atirantados. Son obras muy complejas de ejecución y muy representativas a nivel social.

– Respecto al empleo, ¿cómo definirías la tipología de perfiles profesionales que tienen cabida en el taller de Integralia?

En INTEGRALIA creemos firmemente en desarrollar nuestro producto teniendo como referencia permanente la calidad del mismo, por tanto las características que define a los profesionales que forman parte de nuestro equipo de trabajo son: Implicación, autoexigencia y persevernacia.

El problema de las recalificaciones de chapa entre normativa europea y americana

Por José García-Aranda Ángel

Departamento de Ingeniería Integralia.

En esta época que nos ha tocado vivir, que una empresa salga a trabajar al extranjero parece que es lo normal y lo que ésta debe hacer porque si no estaría condenada a su desaparición. Debido a esto y bajo mi punto de vista, se ha desvirtuado el término, ya que al verlo como una actividad económica básica para su funcionamiento, parece que con que la empresa tenga capacidad económica suficiente para implantarse en un país, la internacionalización está asegurada y con garantía de éxito. Pero no es tan sencillo como lo pintan, normas foráneas, condiciones climatológicas distintas, logística, condiciones fiscales, materias primas,… son factores que van a ser determinantes para que el desarrollo del negocio sea exitoso.

Quizás la construcción sea el fiel reflejo de todos estos “ítem” que una actividad empresarial debe cumplir en el extranjero. Por simplificar un poco nos vamos a centrar en lo que se refiere a normativa y materias primas.

El Hospital Universitario del Estado de Haití es un buen ejemplo. Estamos en un país en el que no existen normas de construcción propias y la materia prima es escasa o más bien nula debido al desastre ocurrido hace ya 6 años casi.

En lo que se refiere a normativa el mecanismo de los Estados es relativamente sencillo: “no tengo, pues cojo una de referencia”, en este caso hay que familiarizarse con las extensísimas normas norteamericanas. Al fin y al cabo desde una óptica simplista, toda parte de diseño de cualquier norma es una adaptación de la resistencia de materiales, a la que aderezamos con unos coeficientes que reflejen la realidad física del país: sismo, viento, calidad de los materiales, fenómenos meteorológicos extraordinarios, geología,… porque al final, la ciencia de la resistencia de materiales es igual aquí que en China.

El verdadero problema está en la materia prima de la obra, necesitamos importar toda la perfilería fabricada en Europa, bajo su norma, a un país bajo norma norteamericana.

El acero que se produce en América no tiene las mismas condiciones técnicas de suministro por norma que el acero europeo, ni en cuanto a estándares de resistencia ni en cuanto a composición química. Y como podréis comprender cambiar la producción de acero es muy complejo. ¿Cómo solventamos este problema de que se nos plantea?

A lo que se procede entonces es a lo que se denomina, recalificación del acero, que consiste en que un laboratorio acreditado, mediante una serie de ensayos establecidos por norma, certifica que el acero que se va a utilizar en la obra cumple con la normativa de calidad que rige, en cuanto a condiciones de suministro, composición química y propiedades mecánicas.

1. comparativa europa vs. americaPara empezar os muestro una tabla (click para ampliar) en la que se hace una comparación entre distintas normas, de las distintas calidades de acero que se especifican.

En ella se puede ver, según el tipo de resistencia, la equivalencia entre ellas. Por ejemplo, podemos deducir que un S355JR europeo es “equivalente” a un A572 Grado 50 de la norma americana (ASTM).

Por lo tanto, si en nuestro proyecto se llegase a especificar que se necesita material de calidad A572 Grado 50, el laboratorio, debe certificar que el S355JR (que es el más cercano) cumple con las condiciones de suministro, composición química y características mecánicas, que impone la ASTM para el A572 Grado 50.

Seamos más gráficos, en las siguientes tablas se puede observar esto que comentamos, ya que la ASTM pide que el A572 Grado 50 tenga un límite elástico superior a 345 MPa y una resistencia de rotura mayor que 450 MPa. Para reclasificar un acero con una nueva “clasificación” los ensayos que hay que realizar son los indicados en la “norma de destino” para el material en cuestión.

En nuestro caso, se complementa la norma general A-6 puntos 10 y 11 con lo indicado en la específica A36, remitiendo a la norma a-370 que indica cómo se hacen los ensayos mecánicos, que en lo que nos ocupa, aplica las dimensiones de la probeta según la figura 3 (plate type 11/2”) de dicha norma.

CALIDAD ACEROS EUROPEOScalidad aceros americanos

Otra parte de la recalificación del acero consiste en el análisis químico de la colada. Como ya sabemos, el acero principalmente es una aleación de un metal, el hierro, con un no metal, el carbono, que mediante difusión de este se forma un compuesto intersticial complejo que mejora las características mecánicas originales del hierro. Pero dependiendo del tipo de acero, existen otros compuestos aleantes que entran a formar parte. En las siguientes tablas se muestra el análisis que debe presentar una colada según norma europea (EN 10025-2: 2004) y según norma norteamericana (ASTM).

analisis colada europaanalisis colada america

Sí que es cierto, que cada normativa no establece una cantidad concreta de cada elemento, sino que da unos márgenes a los que las acerías se deben ceñir.

Todos estos ensayos se recogerán en un certificado de inspección, que acreditará ante nuestro cliente que los aceros que vamos a poner en obra cumplen con la normativa vigente del país de destino, en este caso Haití.

Podéis apreciar entonces que una internacionalización no consiste en un simple esfuerzo económico, sino que también requiere de un esfuerzo técnico por parte de toda la organización para adaptarse a las leyes y normas del país de destino.

 

Alargar la vida de las estructuras metálicas: tratamientos ignífugos

La búsqueda de soluciones óptimas a la hora de proyectar estructuras metálicas pasa por asegurar su capacidad de resistencia y adaptabilidad a las condiciones. Integralia considera esencial la suma de agentes para conseguir resultados óptimos que alarguen la vida de nuestras estructuras metálicas.

En el caso de la reconstrucción del Hospital Universitario de Puerto Príncipe (Haití), Integralia ha trabajado mano a mano con la empresa Miyamoto Internacional, especialista en estructuras antisismos para otorgar a la construcción elementos disipadores de energía y barras de pandeo restringidos, que actúan de amortiguadores de los edificios. Y tan importante se hacen estos procesos en una zona de especial actividad sísmica como la protección contra incendios en cualquier edificio para evitar su colapso.

Existen diferentes formas para proteger las estructuras metálicas y atenuar el efecto del calor sobre el acero. El objetivo es el de mantener la estructura por debajo de los 500º centígrados y evitar así la pérdida de resistencia y, por lo tanto, la deformación del metal que puede acarrear consecuencias desastrosas para la construcción. Es de vital importancia recordar que cuando los materiales metálicos se exponen a altos focos de calor, el incremento de su temperatura puede provocar una alteración de su elasticidad.

Metódos para tratamientos ignífugos

Pinturas intumescentes, morteros ignífugos o placas rígidas de revestimiento, son algunas de las técnicas más usadas por Integralia, que varían su uso dependiendo de la eficacia que se quiera otorgar a la protección superficial contra el fuego y del tiempo que la estructura esté expuesta a éste. Mientras las pinturas intumescentes dejan de ser eficaces en estructuras sometidas al fuego por más de 50 minutos, las placas de revestimiento las protegen hasta tres horas del calor y los morteros ignífugos hasta cuatro horas.

La protección de vigas, cerchas o pilares metálicos a través de pinturas intumescentes se realiza a través de la aplicación de éstas como capa intermedia entre la de acabado y la primera de imprimación. Su uso limitado se debe al escaso tiempo que ofrece de protección contra el calor. Las placas de revestimiento basan su protección en paneles fáciles de instalar y que están compuestos por silicato cálcico por lo que dependiendo del número de paneles colocados aumentará o disminuirá la eficacia de la protección contra el fuego.

Pero sin duda el método más usado es el de los morteros ignífugos que, compuestos por áridos ligeros como lana de roca y aditivos especiales así como ligantes hidráulicos, consiguen una resistencia a las llamas hasta de 4 horas dependiendo del espesor que se aplique a través del dispersor adecuado. Éste debe hacerse dejando tiempo suficiente para que cada una de las capas tenga su tiempo de secado y tras cerciorarse de la eliminación de polvo y grasa para su correcta adhesión al acero.

Por supuesto, la búsqueda de cada solución dependerá del tipo de estructura metálica proyectada y del uso final de la misma, pero no debemos olvidar en ninguno de los casos que estas obras serán usadas por personas y que es su protección la que debe primar en cada momento.

Integralia y su presidente, Antonio Tuñón, protagonistas en la revista Sector Ejecutivo

Integralia_Sector Ejecutivo_Tuñón 1 copia“Una de las compañías más relevantes de la ingeniería española”. Con estas palabras comienza la exhaustiva presentación que la prestigiosa revista Sector Ejecutivo ha realizado a Integralia Industrias Metálicas. Y lo ha hecho a través de una entrevista a Antonio Tuñón, presidente de una compañía de “estructuras metálicas que miran al futuro”, como se titula el texto que puede
encontrarse en la edición de enero de la publicación.

A lo largo de tres páginas, el presidente de Integralia repasa los principales hitos de Integralia como el impulso y profesionalización que supuso la construcción del Estadio de San Mamés para la internacionalización del negocio alentada por la crisis española. En este sentido subraya la presencia del Grupo en Irak, Argelia o Haití además de Colombia, dónde se estudia en la localización de una planta de tratamiento para posibles proyectos en conjunto entre ambas oficinas.

Ingeniero naval y con una dilatada trayectoria empresarial que incluye la dirección general de Integralia_Sector Ejecutivo_Tuñón 2 copiaCEPSA, o puestos de consejero en Red Eléctrica de España o de Hidrocantábrico, Antonio Tuñón augura un futuro prometedor para las estructuras metálicas. “Aporta rapidez y seguridad” señala para añadir otras marcas de la casa Integralia como la eficiencia, la sostenibilidad y la búsqueda de soluciones globales para los clientes.

El presidente de Integralia asegura que su llegada a la compañía supone la transmisión de la experiencia de más de 40 años de trayectoria a una empresa joven que se centra en la creación de valor en todas las fases del proceso productivo. Además, señala la optimización de procesos para garantizar las mejores condiciones al cliente y la formación continua de los trabajadores como objetivos complementarios para continuar con la “constancia y tenacidad” como valores diferenciales.

Integralia_Sector Ejecutivo_Tuñón 3 copiaTambién se repasan algunas claves del futuro de Integralia, sus principales proyectos en España y las principales ventajas e inconvenientes de un equipo que trabaja para “transformar el acero en belleza” y ponerlo al servicio de la sociedad.